Ir al contenido principal

Santa 2.

- Ahora nena, voy a darte tu verdadero regalo de Navidad. – Le susurró Sam.


- ¿Qué es?- Le preguntó Brandy.



- Una larga follada de Navidad Bran.



Sam no podía esperar ni un segundo más, y no podía moverse lentamente por más tiempo, tampoco. Cada momento que pasaba que no estaba enterrado en su interior se estaba convirtiendo en agonía. Levantándose de su sillón, alcanzó el otro sillón en tan sólo unos pocos pasos y, posicionándose entre sus muslos, miró hacia abajo. Su hermoso sexo le hacía señas, separado para él como un mar de color rosa. Sus labios interiores seguían desplegados por el vibrador, su pasaje una oscura abertura que necesitaba ser llenada con cada pulgada de su dura y ardiente erección. Sin más dilación, empujó su polla profundamente en su interior. Deslizando sus manos hacia arriba por el vestido, cerró los dedos sobre sus amplios pechos, moldeándolos a través del suave tejido. Todavía follándola, bajó su boca completamente sobre el pecho al descubierto, succionándolo con tanto entusiasmo como ella había hecho con su erección. Ella jadeó, gimió y agarró su pelo entre sus dedos para retenerlo allí mientras arqueaba su pecho, forzando más de su suave seno dentro de su boca. Él continuó hundiendo en su interior. La folló largo, duro y profundo, como había prometido.



Bran gritó ante todos y cada uno de los empujes, sintiendo como si su sexo pudiese estallar en cualquier momento. Sam la penetraba una y otra vez, cada vez más y más fuerte que la anterior embestida llenándola más allá de toda comprensión. Y justo cuando estaba empezando a preguntarse cuánto tiempo más sería capaz de soportar aquello, Sam sacó su duro eje fuera de ella.



Un orgasmo tremendo como ninguno que jamás hubiera conocido rugió a través del suyo propio, interrumpiendo sus palabras con un tremendo gemido. Dejó escapar feroces gritos con cada duro pulso de un clímax que fue tan fuerte, tan intenso y extraño, que era casi doloroso aún cuando le entregaba el máximo placer jamás entregado a ningún otro hombre.




- Feliz Navidad dulzura. Le dijo Sam dándole un beso largo y apasionado.


- Feliz Navidad amor. Le respondió Brandy con todo su amor.















Entradas populares de este blog

Intense

Lo necesitábamos, ese nivel de intimidad, antes de la separación. El dulce y suave tacto de sus labios sobre mi piel hizo que se me erizase el vello sentir sus dedos en mi cuerpo quemaba lentamente a medida que intensificaba las caricias. Anhelándolo para que me abriera y se arrastrara dentro de mí. Su aliento era cálido contra mi cuello mientras me arrancaba la ropa interior exponiéndome al húmedo y sofocante aire que nos rodeaba. Fue algo muy primitivo, la forma en que me agarraba y me miraba. Me tensé al instante cuando su mano recorrió mi muslo interno, mi respiración se convirtió en un largo suspiro.  Temblaba ante su contacto mientras se guiaba hasta lo más profundo de mí ser, en un instante me había rendido completamente a él, como siempre había hecho, como siempre iba a hacer. En un intenso forcejeo, sin dejar de poseer mi boca, me hizo tambalearme hacia atrás y entonces me reclamó. Mi cuerpo se tensó alrededor del suyo mientras pedía una liberación que pudiese eliminar...

Vuelo en Escala 2.

Llegamos al hotel y mientras subíamos a nuestras respetivas habitaciones no dejábamos de mirarnos a los ojos, de pronto y con una pausada sonrisa que hace estremecer todo mi cuerpo, me atrapa con sus manos y vamos cuesta abajo, nos besamos y abrazamos entre risas. Al entrar a la habitación, lo único que miramos es donde está la cama, a la porra todo lo demás. De inmediato siento sus manos que me desnudan y me acarician a la vez, mordiéndonos y besándonos mientras nos miramos, sacándole la camisa desabrochando su pantalón, notando sus manos bajo mi vestido, bajo mis bragas… manos rápidas que me excitan, que me hacen gemir, manos fuertes que me hacen vibrar como nunca antes me había pasado. Caemos sobre la cama desnudos, ansiosos, tocándonos, acariciándonos… cae sobre mi cuerpo y mis piernas enlazan su cintura, ahora no podemos contenernos y lo quiero dentro, su miembro se frota en mi sexo y me penetra de golpe haciéndome gemir, se mueve rápido dentro de mí, estoy completamente a su merc...

Gin & Nick 2.

GIN. Tuve que aguantar el aliento cuando él presiono ahí, mis músculos pulsaron ante una fresca ola de calor, humedeciéndome aún más. Levanté las caderas tratando de coaccionarlo a ir más profundo. Pero él saco su pene y un gemido de protesta salió de mi interior. Nick empujó hacia arriba, balanceándose sobre sus rodillas y un brazo. Abrí los ojos para mirarlo como tomaba su pene, y me volvía a atormentar pasando la cabeza de su miembro por mi pelvis. Su sonrisa era malévola y sexi. Su pene, resbaladizo y húmedo, casi se deslizó hasta el fondo.  - Nick… No tuve que pedirlo dos veces. Un sólido empuje y su rígido miembro se condujo profundo dentro de mi sexo, llenándome rápido, robándome el aliento. Abrí mi boca para gritar, pero ningún sonido salió, medio latido después mis pulmones jadearon en busca de aire, parecía que se me había olvidado hasta como respirar. Nick me sostuvo detrás de sus rodillas, presionando mis piernas hacia atrás. Esa posición colocaba mi sexo haci...